Oaxaca de Juárez, Oax., a 28 de marzo de 2011.
DIP. MARTÍN VÁSQUEZ VILLANUEVA
PRESIDENTE DE LA JUNTA DE COORDINACIÓN POLÍTICA Y
COORDINADOR DE LA FRACCIÓN PARLAMENTARIA DEL PRI
DIP. JUAN MENDOZA REYES
COORDINADOR DE LA FRACCIÓN PARLAMENTARIA DEL PAN
DIP. CAROL ANTONIO ALTAMIRANO
COORDINADOR DE LA FRACCIÓN PARLAMENTARIA DEL PRD
DIP. MARGARITA GARCÍA GARCÍA
COORDINADORA DE LA FRACCIÓN PARLAMENTARIA DEL PC
DIP. HITA RUIZ SILVA
COORDINADORA DE LA FRACCIÓN PARLAMENTARIA DEL PT
PRESENTES
Señores diputados, señora diputada:
Animados por la esperanza de alcanzar una sociedad más justa y democrática, en donde la ciudadanía siga teniendo una intervención decisiva, queremos ser partícipes del proceso de elección de los miembros del Consejo General del Instituto Estatal Electoral de nuestro Estado; por esta razón, acudimos a esta soberanía para proponer a nuestro hermano VICTOR LEONEL JUAN MARTÍNEZ para participar en dicho proceso. Sabemos de las limitaciones que nos imponen la legislación y la convocatoria que han emitido, nos pronunciamos en contra del reparto de cuotas en que se ha convertido la elección de los consejeros electorales y apelamos a su alta responsabilidad legal e histórica, como nuestros representantes, para que hagan suya nuestra propuesta y atiendan nuestra petición.
Es oportuno y pertinente hacer énfasis en las razones que sustentan nuestra propuesta, así como en las implicaciones que tendrá su decisión de integrar un Consejo General con ciudadanos honorables, con experiencia en materia electoral, tanto de los comicios que se realizan por el régimen de partidos políticos como, aquellos que se efectúan por los sistemas normativos de municipios y comunidades indígenas.
El reconocimiento del sistema electoral de “derecho consuetudinario” en nuestra legislación, constituyó un hecho de vital importancia para la existencia de los Pueblos indígenas y para la democracia en nuestro Estado; en los hechos, la ley y la sociedad oaxaqueña se reconocieron pluriculturales y con ello sentaron las bases para dar una respuesta política a la diversidad que nos caracteriza en términos del artículo 2 de la Declaración Universal de las Naciones Unidas para la Educación la Ciencia y la Cultura (UNESCO); con este proceder nuestra entidad federativa se colocó a la vanguardia en nuestro país y en el mundo; sin embargo, desde su inicio, este reconocimiento ha tenido una debilidad fundamental dado que no está previsto que nuestros pueblos tengan voz y decisión en el Instituto Estatal Electoral ni en el Tribunal Electoral de nuestro Estado, como tampoco existe un procedimiento adecuado para la solución los conflictos que se suscitan. Como resultado de esta situación nuestras normas, procedimientos e instituciones son debatidas, juzgadas y muchas veces modificadas a la luz de los intereses de los partidos políticos y en detrimento de nuestra institucionalidad comunitaria.
La situación no es menor si tenemos en cuenta que en nuestro estado, 418 municipios que representan el 73 por ciento del total estatal, elegimos a nuestras autoridades municipales por el Libro IV del código electoral y somos estos Municipios los que no sólo exigimos reconocimiento, sino también, reclamamos participar en los debates y en la toma de decisión. En buena medida, los conflictos municipales más graves que se han presentado, derivan de una actuación dolosa de los operadores del IEE o de su desconocimiento de las formas de acceso a los gobiernos locales de estos municipios.
Nuestra experiencia, desde 1995, nos ha mostrado que es profundamente incongruente, discriminatorio e incompleto un reconocimiento de la diversidad que no se refleje en la estructura y composición de las instituciones. La actual conformación del Consejo General del Instituto Estatal Electoral en el que sólo participan representantes del sistema de partidos políticos es insuficiente en una sociedad diversa y pluricultural, como lo marcan los instrumentos internacionales, entre ellos la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y el propio marco constitucional mexicano, es necesario establecer mecanismos que garanticen la autonomía política, al mismo tiempo que permitan el acceso a la jurisdicción estatal. De igual forma, compartimos el criterio sostenido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), quien ha determinado que los partidos políticos no son la única y exclusiva vía de participación política, máximo en sociedades con presencia de Pueblos Indígenas.
Frente a esta situación, planteamos como urgente que en el Consejo General del Instituto Estatal electoral se integren representantes indígenas y expertos en sus sistemas normativos. Por lo anterior, pedimos que nuestro hermano VÍCTOR LEONEL JUAN MARTINEZ, originario del Municipio Zapoteco de Villa De Díaz Ordaz, sea inscrito en el proceso de elección de consejeros electorales, en virtud de su conocimiento sobre la temática electoral, tanto de partidos electorales y, especialmente de los procesos de elección por sistemas normativos comunitarios, así como por su excelente formación académica y su amplia trayectoria en defensa de la democracia en la entidad, la que ha sostenido desde la academia, los medios de comunicación y la sociedad civil. Conocedores de la verificable trayectoria, amplia experiencia, conocimientos y solvencia moral de nuestro compañero, solicitamos sea electo miembro del Consejo General del Instituto Estatal Electoral.
Un requisito esencial de quienes integren dicho consejo es su independencia de los partidos políticos. La constitución de una institución encargada de organizar y regular las elecciones ha sido, en México, un triunfo de la ciudadanía. Sólo un Instituto Estatal Electoral ciudadanizado, con autonomía real, profesionalismo y solidez ética, dará confiabilidad y certeza en los resultados y permitirá encausar por la vía institucional las diferencias naturales que se presentan en los procesos electorales. La mejor garantía que tienen los partidos políticos de no estar sujetos a los acuerdos o alianzas coyunturales y los vaivenes marcados por el calendario electoral, es que los consejeros estén al margen de esos institutos políticos y tengan independencia de los gobiernos. Nuestro compañero VÍCTOR LEONEL JUAN MARTÍNEZ reúne todos estos requisitos esenciales, por lo cual reiteramos que cuenta con la capacidad, experiencia e integridad ética para formar parte del Consejo General del IEE.
Esperamos que nuestra voz ahora sí sea escuchada por quienes se supone son nuestros representantes populares.
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